martes, junio 26, 2007

Los calzones rotos de la abuela y el Cielo se está poniendo interesante.

Hoy la echo de menos. Igual que ayer. Y como antes de ayer. Y como mañana.
Hoy la hubiera llamado y hubiera contestado sus mismas preguntas de siempre sin mirar al cielo pidiendo paciencia.
Le diría que la adoro y la acompañaría a leer el diario.
Hoy le hubiera preguntado por su vida en trajes de etiqueta y vestido largo para las señoritas, carruajes, matines y monjas francesas. Por su querida y sufrida mamá, por su hermana Reina, por cómo era mi tata Fernando, por ella, por lo que pensaba, por lo que sentía...
Le hubiera dicho que me acuerdo de cada una de las noches que tuve miedo y me fui a meter a su cama.
Le diría que todavía tengo miedo.
Le pediría que no me hablara más del día en que se fuera a morir y entre pucheros con pinta de risas (no me quiero olvidar de esa risa, no quiero que se borre, no quiero que me cueste verla, no quiero que se la lleven ) me miraría con sus ojitos casi sin pestañas, chicos , brillantes, mojados, llenos de ternura. De tanta ternura.
Hoy me hubiera despertado chascona, pálida, ojerosa y ella me hubiera dado un beso y me hubiera dicho con toda la sinceridad del mundo " a dónde va esta niñita tan bonita".
Hoy le volvería a rezar a Sta Teresita de los Andes y creería en la Virgen de Montserrat.
Hoy le hubiera dado las gracias por todas las veces que llegó a mi lado cuando estuve enferma, cuando me sentí mal, cuando me sentí bien y quise que alguien se sintiera orgulloso de mi. Por todas las veces que me pidió que la acompañara, que me quedara con ella, como si eso fuera a alegrarle todo el día. Por todas las veces en que fue la única que se acordó de mi santo y le pareció una fecha tan importante.
Hoy le diría que la echo de menos a rabiar, que la pena es más brava de lo que alguna vez imaginé. Hoy le pediría que por favor no se fuera. Hoy le pediría que me perdonara, perdón, perdón, por favor perdóneme ... ¿Cómo me fue a dejar sola?, ¿cómo no me dejó despedirme de usted?, ¿Cómo no se quedó para verme titulada, para verme casada ... para todas las cosas que me prometió vivir conmigo?
Hoy le diría que quisiera ser un pedacito de ella. Hoy le diría que la admiro, que su manito me sigue pareciendo la más suave del mundo, que me traiga calzones rotos y sopaipillas porque hace frío y quiero que me regalonee.
Hoy que me gusta menos el mundo ahora que mi persona favorita ya no está en él, ahora que me siento guacha, ahora que no tengo a nadie con quien poder ser chica de verdad, ahora que me quede más sola, ahora que me quema, que me ahoga, que me mata no tenerla ...
Hoy le hubiera dado un beso en la frente al despedirme, le daría la mano y le diría : Gueli ... me gustó tanto ser su nieta.